Manzanas confitadas como en el mercado de Navidad

Para preparar las manzanas confitadas, lávelas y séquelas bien. Retire los tallos e introduzca en su lugar los palitos de madera en las manzanas. Clavar los palitos es especialmente fácil si antes se hace un pequeño agujero con una brocheta shashlik.

Poner el azúcar y el agua en un cazo grande y llevar a ebullición, removiendo constantemente. Es importante no dejar de remover, de lo contrario el azúcar se quemará y arruinará toda la receta. Reducir el fuego a moderado y cocer a fuego lento hasta obtener un sirope medianamente espeso. A mí personalmente me gusta utilizar un termómetro de cocina para conseguir la consistencia perfecta del sirope. La temperatura óptima ronda los 145-150°C, que es la llamada fase de "craqueo duro".

Retirar del fuego, añadir el colorante alimentario y remover bien. Este paso es opcional y sólo para quienes deseen un color específico. Yo suelo omitirlo, ya que creo que el color caramelo dorado del azúcar es suficientemente bonito.

Sumerja las manzanas individualmente en el almíbar y cúbralas por completo. La cobertura debe hacerse rápidamente, ya que el almíbar se endurece muy rápido en cuanto se enfría.

Si lo desea, decore las manzanas confitadas recubiertas y colóquelas en una bandeja de horno forrada con papel de hornear y déjelas enfriar completamente hasta que el recubrimiento de azúcar se endurezca. ¡Disfruta de las manzanas confitadas tal y como se venden en el mercado navideño!