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Espaguetis sicilianos de berenjena a la Norma
Esta receta es una mezcla aromática de tomates frescos y berenjenas con un toque equilibrado de chile y albahaca. La magnífica cobertura de queso ricotta salado mantiene todo unido con tanta armonía, convirtiéndolo en una obra maestra de la cocina italiana.
Ingredientes
- 1 berenjena grande
- 400 g de espaguetis
- 400 g lata de tomates
- 3 Clavo ajo
- 1 Chili (rojo)
- Un puñado de hojas de albahaca fresca
- 100 g De Ricotta Salata (se puede sustituir por parmesano si es necesario)
- sal
- 4 cdas De aceite de oliva virgen extra
Procedimiento
Empieza cortando la berenjena en rodajas de medio centímetro. Salar cada capa en un escurridor y dejarlas reposar unos 30 minutos. Esto ayudará a eliminar el amargor de la berenjena, un consejo que aprendí de los mejores. Por último, enjuague las berenjenas y séquelas.
Calentar un poco de aceite en una sartén grande a fuego medio. Añada las rodajas de berenjena y cocínelas hasta que se doren por ambos lados. Deben estar blandas pero no pastosas; la textura perfecta es la clave.
Mientras se cuece la berenjena, pon a hervir agua con sal para los espaguetis. Acuérdate siempre de salar el agua para la pasta, ya que ayuda a darle sabor desde el interior. Cuece los espaguetis siguiendo las instrucciones del paquete.
Mientras tanto, pica el ajo y trocea la guindilla. En una sartén aparte, añade un poco de aceite, el ajo y la guindilla, y saltéalos hasta que desprendan aroma. Añada las latas de tomate y deshágalas con una cuchara. Déjalo cocer a fuego lento hasta que espese un poco; suele tardar unos 15 minutos, pero confía en tu instinto.
En este momento, la pasta debería estar lista. Escúrrela reservando un poco de agua de la pasta. Añadir un poco de agua de la pasta a la salsa ayuda a espesarla y hace que se adhiera mejor a la pasta, un consejo que compartí con todos mis amigos en casa.
Incorpore las berenjenas cocidas y la albahaca picada a la salsa de tomate.
Mezclar los espaguetis escurridos con la salsa. Remover bien, asegurándose de que cada hebra de espagueti quede cubierta por la salsa.
Servir caliente, adornar con generosas virutas de Ricotta Salata (o Parmesano) y unas hojas de albahaca fresca por encima, sella el plato con cada bocado, creando una sinfonía de sabores.