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Potaje mediterráneo de garbanzos con especias
Este delicioso guiso mediterráneo de garbanzos es un plato abundante y saciante que llevo años preparando.
Ingredientes
- 2 cdas aceite de oliva
- 1 cebolla grande picada
- 3 clavo Ajo picado
- 2 zanahorias en rodajas
- 1 pimiento rojo picado
- 1 lata Tomates en dados
- 2 latas garbanzos escurridos y enjuagados
- 4 tazas caldo de verduras
- 1 cucharadita comino
- 1⁄2 cucharadita cúrcuma
- 1⁄2 cucharadita pimentón ahumado
- 1⁄2 taza perejil fresco picado
- Sal y pimienta
- Gajos de limón y queso feta para servir
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Procedimiento
Comience calentando el aceite de oliva en una olla grande a fuego medio. Este es un paso importante, ya que ayuda a liberar el aroma y el sabor de sus ingredientes para obtener el máximo sabor.
Cuando el aceite esté caliente, añade la cebolla y el ajo. Cocínelos hasta que estén blandos, lo que suele llevar unos 5 minutos. Este proceso se llama sudar y es esencial en la cocina, ya que extrae los sabores de la cebolla y el ajo.
Cuando la cebolla y el ajo se hayan ablandado, añade las zanahorias y el pimiento. Cocínelos durante unos 5 minutos hasta que se ablanden un poco. Añadir estas verduras en este momento les permite absorber los sabores de la cebolla y el ajo.
Vierte los tomates cortados en dados, los garbanzos escurridos, el caldo de verduras, el comino, la cúrcuma y el pimentón ahumado. Estas especias le darán a tu guiso un sabor cálido y reconfortante con la quintaesencia del sabor mediterráneo.
Lleve el guiso a ebullición, luego reduzca el fuego y déjelo cocer a fuego lento durante 20 minutos. Dejar que el guiso cueza lentamente garantizará que todos los ingredientes estén bien cocinados y que todos los sabores se combinen para crear un sabor increíble.
Después de cocer a fuego lento, añadir el perejil picado y sazonar al gusto con sal y pimienta. Añadir el perejil hacia el final de la cocción mantendrá su sabor fresco y vibrante en el plato terminado.
Sirve el guiso mediterráneo de garbanzos en cuencos, adornado con una rodaja de limón y una pizca de queso feta por encima. El limón aporta un contraste ácido a la riqueza del guiso, mientras que el queso feta añade un toque de cremosidad.